La disposición del barrio de El Cañaveral (Vicálvaro) va a cambiar de forma considerable tras la Modificación Puntual del Plan Parcial vigente, que recibe este lunes el dictamen favorable de la Comisión de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad. Lo que ahora mismo es un enorme solar de más de 388.352 m2, y que estaba planteado como una gran rotonda, con edificios en su interior y rodeada de zonas verdes, se convertirá en un gran parque central rodeado por un carril bici de 3,2 kilómetros y contará con un intercambiador de transporte.
La iniciativa impulsada por el delegado del área, Borja Carabante, se aprobará en el Pleno la próxima semana y permitirá "mejorar la calidad de los espacios urbanos, así como la capacidad de servicio, la funcionalidad y la eficiencia de las dotaciones públicas previstas, sin alterar la edificabilidad ni alterar el reparto de los distintos usos", señalan desde el área de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad.
Este gran parque dará continuidad a la estrategia municipal del Bosque Metropolitano. Con la renaturalización de la zona "se posibilitará la penetración del Bosque hasta el parque central, facilitando la conectividad de todo el sistema", matizan desde el área. La gran superficie de suelo permeable permitirá la regulación del agua de lluvia, al mismo tiempo que reducirá el efecto isla de calor, la contaminación atmosférica y acústica y mejorará la calidad del aire.
Respecto a la ordenación de la edificación, la iniciativa establece que a partir de la posición central del parque se ordenen las manzanas a partir de unos criterios: las nuevas parcelas se insertan en el parque, de tal forma que la zona verde se ubica siempre entre la nueva edificación y la perimetral ya existente. Además, busca la implantación de servicios de proximidad en localizaciones estratégicas de la zona residencial.
Un gran intercambiado de transportes
El Plan Parcial contempla la ubicación de un intercambiador de transporte público en esta manzana central, para que se configure como nodo de confluencia de los distintos medios de desplazamiento. En concreto, se localiza en el eje de la Gran Vía de Sureste, en el tramo de acceso al próximo al anillo central. "Es la alternativa que aporta mayor flexibilidad para acoger distintas soluciones en el futuro, en función de los sistemas de transporte público que finalmente se activen en El Cañaveral", indican desde el área. "Se trata de una manzana discontinua que no interrumpe el tránsito peatonal y permite la continuidad de la red viaria. Bajo rasante, es una parcela continua", detallan.
Vía pecuaria y ajustes en los accesos
La iniciativa aprobada en la comisión también resuelve la continuidad de la vía pecuaria Cordel de Pavones, en su cruce con la M-45. En un principio se diseñó un paso inferior cuya ejecución debía acometer el Ministerio de Fomento, como administración titular de la infraestructura. Sin embargo, ese paso inferior nunca fue construido y, en consecuencia, la vía pecuaria ha quedado desconectada. Para solventarlo, la Junta de Compensación de El Cañaveral elaboró un proyecto en el que se propone prolongar el trazado de la vía pecuaria, en ambos márgenes de la M-45, para finalmente conectarlos a través de una estructura de paso sobre la autovía.
Entre las modificaciones de los accesos que se aprueban destacan las diseñadas en la entrada de los pasos inferiores de la R-3, en el suroeste de la zona industrial; las vías que bordean la zona industrial por el este y el sur; y en el enlace de El Cañaveral con el sector de Los Ahijones. Además, se cambia la distribución del suelo asignado a gasolineras para garantizar su viabilidad y mejorar su funcionalidad.
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